Indicado en pieles envejecidas, deshidratadas, con manchas o faltas de tono y luminosidad.
La aplicación de la luz pulsada proporciona un calor en la dermis provocando una nueva síntesis de colágeno, que se deposita sobre el magma fibro-elástico deteriorado por el envejecimiento. El efecto visible es la recuperación de la textura, la definición del óvalo facial, la disminución de las arrugas, el aumento de la hidratación, la unificación del tono y el aumento de la luminosidad.
El protocolo del tratamiento de fotorrejuvenecimiento facial es una vez por semana, recomendando un mínimo de 6 sesiones.
Si necesitas más información acerca de las características y precios del tratamiento, contacta con cualquiera de nuestros centros de estética en Madrid, estaremos encantados de atenderte.